Boris Larramendi, El rapto de los derechos de autor

Ayer, noche de San Juan, asistí a un "concierto íntimo" de Boris Larramendi (músico, trovador y poeta.) en la Cafebrería Cuba Libro.
Boris Larramendi, miembro de Habana Abierta, grabó hace en 2003 su disco en solitario llamado "Yo no tengo la culpa" producido por Alejo Stivel. A las puertas de comercializar el disco BMG absorbe la discográfica, quedándose con el máster, y negándose a comercializarlo o a devolvérselo.
Extraño ejemplo, las discográficas, grandes defensoras de los derechos de autor, niegan el derecho de producción, quedándose con un máster que no les interesa y dejando al artista sin posibilidad de comercializar un producto generado por él.
Boris tiene un directo apasionado, mezcla de rock, protesta y son, el viernes y el sábado llenó el local de ritmo con la única ayuda de su guitarra.
Boris Larramendi tiene un espacio personal en Myspace donde se pueden oir algunas de sus nuevas canciones y seguir sus conciertos. Además tiene una alta presencia en youtube con videoclips, conciertos y entrevistas.
El máster condenado de Boris debe de ser uno de muchos que no salen a la luz por culpa de esas "fuentes de cultura" que dicen ser las discográficas. Este caso me deja claro que la industria discográfica necesita un cambio de base (a una que sea potencia de 2).